Mochuelo europeo
Mochuelo europeo o mochuelo común (Athene noctua)
Se podría decir que el mochuelo es el ave strigiforme más común en la Península, tanto por sus costumbres como su alimentación.
Es una pequeña rapaz nocturna de formas rechonchas, con una voluminosa y redondeada cabeza carente de penachos cefálicos. Sus plumas son de tonos marrones y grisáceos profusamente moteados de blanco con las partes ventrales más claras que las dorsales, aunque aparecen también intensamente moteadas. En su ancha cabeza se pueden observar unas finas manchas blancas que la adornan, y las llamativas cejas blancas enmarcan unos grandes ojos amarillos de expresión sorprendida. La cola es corta, al igual que las alas, que tienden a ser redondeadas; tanto una como otras aparecen abundantemente barradas con franjas parduzcas.
Al ser un ave de hábitos parcialmente diurnos, sobre todo en época de cría, se la puede observar sobre tocones, tejados o majanos, incluso durante las horas centrales del día. Es muy fácil verlo en los postes de teléfono al atardecer. Vive sobre todo en zonas de arbolado disperso, como olivares y dehesas, teniendo predilección por los montones de piedra.
Se le puede encontrar en prácticamente todo el territorio nacional, a excepción de los grandes sistemas montañosos, y en cuanto al número estimado de ejemplares, la población española es la más importante del continente europeo.
Posee una dieta muy variada, que varía notablemente en función de la disponibilidad local de presas. En el sur, un porcentaje alto de la dieta está compuesta de invertebrados (grillos, escarabajos, saltamontes, polillas, lombrices, etc.), mientras que a medida que se asciende en latitud aumenta la proporción de vertebrados (especialmente roedores).
Aún siendo una especie muy adaptable, cambios en el mundo agrario, el uso de productos tóxicos en la agricultura o los atropellos, son las principales amenazas.